miércoles, 19 de enero de 2011

Que remolinos de sentimientos, pueden volver la pantalla de la mente una completa confusión...
Por qué? Por qué hay un por qué en mi mente? Y por qué ha ese por qué no le encuentro respuesta? No lo sé ....
Duele no tener respuestas...
Duele la confusión, pequeño remolino giratorio que ha cavado una fosa, aquí dentro de mi ser, y se ha plantado ahí sin permiso y sin querer y aún así a esta dualidad que duele...sencillamente la disfruto...